Capítulo 15: Reflexiones.

. Los amores pueden ir y venir, pero los amigos no. Podría estar un año contándote las cosas que hicieron por mí y sin esperar nada a cambio. Cuando alguien es tu amigo de verdad, tus problemas son sus problemas, si vos sufrís tu amigo también sufre, si vos necesitas ayuda ellos son los que están. Un amigo no te deja en banda y no especula si le conviene estar o no con vos, un amigo esta, esta y siempre al pie del cañón. Podes ir y venir, podes pelearte una y mil veces, pero la amistad va mas allá de eso. Es como un lazo transparente que te une de por vida... así que mejor intentaré hacerle un poquito de caso a Rob.
Esa mañana me levante muy temprano, a eso de las 7 de la mañana. Un abrumante sol se asomaba por mi ventana, y alumbraba toda la habitación. Ésta se encontraba en un completo silencio. Me quedé sentada en la cama, pensando…
Kristen había sido mi amiga, estado conmigo en todos mis momentos, vivimos juntas y compartimos muchas cosas. ¿Valía la pena discutir y distanciarnos por una película?, al fin y al cabo, ya esta… Las dos estábamos en ella, y no había de que estar enojadas.
El pasado pisado, Kris fue mi mejor amiga, mi única amiga a decir verdad, y no podíamos distanciarnos para siempre, menos por una película.
La llamaría ya mismo, si fuera por mí. Me quedé pensando un rato más. Si, definitivamente… todo mi enojo se había ido, y el de ella por lo que paso ayer también, así que no había nada mas que pensar. Kris y yo volveríamos a ser inseparables.
Corrí a buscar mi movil. No tenia idea de donde lo habría dejado la noche anterior, y empecé a revolver todo en su busca. Al cabo de 2 minutos, mi habitación entera estaba desordenada, y mi móvil no aparecía.
Me resalté cuando algo vibró. Era mi movil! Corrí en busca de su sonido, que debía estar en la habitación. Lo encontré un minuto mas tarde, bajo mi almohada. ¿Qué hacia ahí?
Atendí la llamada que tenía, era Kris, pero ni bien presioné el botón para hablar, había cortado. Me dejó un mensaje, que lo escuche con detenimiento:

Nikki.
Se que estas muy enojada, solo quería pedirte perdón y decirte que siento lo que hice, no me mereces como amiga, así que no te molestare mas y no me meteré mas en tu camino. Que seas feliz.
Kristen.

Me resalté al terminar de oírlo, y marque su numero enseguida, muy preocupada. Me había decidido a perdonarla, a rehacer nuestra vida… No podía decirme justo ahora que me dejaría en paz. Fui muy dura con ella en la grabación, pero me sentía mal ahora… Culpable nuevamente.
Marqué su número que aún tenía guardado en mi agenda telefónica. Daba ocupado. Tiré el móvil a la cama, enojada y me tiré en el piso. Volvería a llamar en unos minutos. Decidí pasar el tiempo ojeando una vieja revista que encontré en un mueble…
Pasaron unos cinco minutos, y sin mas paciencia, volví a marcar el número.
- Hola Kris! – suspiré aliviada –
- Disculpa si te molestó el mensaje – malinterpreto mi suspiro –
- No me molesto, al contrario… Quiero que hablemos.
- Genial – se notó un cambio en su voz, mas alegre – Quieres venir a mi casa?.
- Dale, a las 3 de la tarde, te parece? Ahora es algo temprano…
- Si, a esa hora. Te espero. Un beso.
- Adiós – corté –


A las horas, cuando ya no era tan temprano, apareció Rob en la puerta de la casa de Nikki. Sus padres ya estaban levantados. Corrió escaleras abajo, y abrió la puerta.
- Hola amor – susurró –
- Hola! ¿Cómo estas?
- Bien, vos? – me contesto –
- Re bien. Hablé con Kristen.
- De veras?
- Si. Estuve pensando. Éramos muy amigas, no dejaremos todo atrás por una película.
- Pienso igual – sonrió – Me alegro que sea así.
- Yo también… Arreglamos vernos en su casa a las 3 de la tarde para hablar bien.
- Te llevo, si quieres?
- Claro – agregue – Quieres comer?
Se quedó a comer. Luego de almorzar, ya casi era la hora… Nos subimos a su auto, y partimos hacia la casa de Kristen.